¿Sabías que la forma en que usas tu almohada puede afectar significativamente la calidad de tu sueño? Según los expertos, muchas personas no están aprovechando al máximo los beneficios de las almohadas mientras descansan.
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A lo largo de la vida, pasamos unos 26 años durmiendo, sobre todo cuando se llega a los 80 o más. Con tanto tiempo en la cama, es fundamental elegir la mejor posición para dormir y aprovechar al máximo ese precioso tiempo.
Si normalmente solo usas tu almohada para apoyar tu cabeza mientras duermes, es hora de replantearte tus hábitos. Este uso limitado está lejos de explotar todo el potencial de las almohadas.
Los expertos en sueño de Happy Beds sugieren un cambio simple que puede tener una gran cantidad de beneficios: usar una almohada adicional entre las piernas.
Lo crea o no, dormir con una almohada entre las piernas puede tener una serie de beneficios sorprendentes.
Además de brindar mayor comodidad durante el sueño, esta práctica puede ayudar a reducir el dolor de espalda, prevenir los calambres musculares y mejorar la circulación sanguínea.
Durante el sueño, los músculos de la espalda se relajan y se recuperan, lo que hace que la postura durante este tiempo sea aún más importante.
Con aproximadamente el 23 % de la población mundial que sufre dolor de espalda crónico, este simple cambio puede tener un impacto significativo en la calidad del sueño y reducir las molestias.
Rex Isap, experto en sueño y CEO de Happy Beds, destaca la importancia de tener en cuenta la postura al acostarse: “Al subirnos a la cama, adoptamos una posición preferida para dormir sin pensar demasiado en ella. No nos damos cuenta de que lo que nos resulta cómodo en realidad puede hacer más daño que bien”. – explicó al tabloide británico The Mirror.
Y agrega: “La desalineación al dormir es un problema grave, ya que ejerce una presión adicional sobre la columna vertebral. Aunque usamos almohadas para apoyar la cabeza, debemos explorar más a fondo sus beneficios para dormir. Al colocar una almohada entre las piernas o las rodillas, promovemos una postura adecuada que resulta en una noche de sueño más reparador, apoyando la músculos y alineación del cuerpo.”
Además de aliviar la presión en la espalda y las caderas, el uso de una almohada entre las piernas también reduce la tensión muscular, beneficiando a quienes sufren de dolor crónico durante el sueño.
Este simple cambio proporciona una posición para dormir más alineada, ayuda en la digestión y mantiene la columna vertebral alineada con el cuello. Para las personas que roncan, dormir de lado con una almohada entre las piernas puede ayudar a abrir las vías respiratorias y mejorar la calidad de la respiración.
Si alguna vez te has despertado con hormigueo, piernas entumecidas, calambres o una sensación de hormigueo en los dedos de los pies, es probable que esté relacionado con una mala circulación sanguínea.
La presión sobre la vena cava, responsable del flujo de sangre al corazón, puede aliviarse usando una almohada entre las piernas, facilitando el flujo sanguíneo y reduciendo los molestos síntomas.
Las mujeres embarazadas también pueden beneficiarse de esta práctica, ya que a muchas les cuesta encontrar una posición cómoda durante la noche. Usar una almohada entre las piernas puede brindarle un sueño más reparador y mejorar su comodidad durante este momento especial.