En primer lugar, uno de los momentos más difíciles de atravesar es la muerte de un ser querido. A veces deseamos haber podido decir unas últimas palabras a la persona.
Lo que pasa es que los estudios dicen que el sistema Auditorio es el último sentido que deja de funcionar en el momento de la muerte, así que tal vez todavía puedas decir lo que quieras. Esta investigación se realizó en 2020 y se publicó en Scientific Reports. ¡Sepa mas!
vea mas
MCTI anuncia la apertura de 814 vacantes para el próximo concurso de carpetas
El fin de todo: los científicos confirman la fecha de la explosión del sol y...
Para los estudios a realizar, los investigadores utilizaron la tecnología de electroencefalografía (EEG). A través de él es posible medir la actividad eléctrica del cerebro. Los datos se recogieron de personas conscientes y más tarde cuando ya no estaban conscientes.
Elizabeth Blundon, autora principal del estudio, dijo que el cerebro humano puede responder a las señales de sonido hasta el último momento de la vida. Esto es previo a una muerte natural, es decir, cuando las personas están en la fase de insensibilidad.
Con ayuda del EEG se pudo detectar que los pacientes, horas antes de morir, eran capaces de responder a las señales sonoras de forma muy similar a los jóvenes sanos.
Esta comparación se hizo a partir de otro estudio realizado en Europa, en el que se analizaron las respuestas cerebrales de individuos sanos y pacientes con daño cerebral.
Después de la aprobación de los pacientes, los investigadores realizaron grabaciones cerebrales de algunos de ellos cuando ya no respondían.
Los médicos han informado que han sido testigos de varias reacciones de los pacientes cuando sus seres queridos se comunicaban con ellos. Esto sugiere que el cerebro reacciona a las señales de sonido antes de la muerte natural.
Todavía no hay estudios que demuestren si los pacientes entienden o no lo que se dice. Aunque el cerebro responde a los estímulos, no se puede decir que entienda el lenguaje por sí mismo.
En general, este estudio dice mucho sobre la importancia de acompañar a nuestros familiares hasta los últimos momentos antes de la muerte.