¿Cuánto tiempo pasamos antes de comenzar algunos cambios de hábitos importantes en nuestras vidas? Podemos decir que la falta de motivación y la procrastinación suelen ser las principales barreras para que se produzca cualquier cambio y logro. Entonces, aquí hay algunos consejos sobre cómo lograr rápidamente la motivación para que pueda dejar de procrastinar.
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Para que podamos romper con el hábito de posponer constantemente tareas importantes, es fundamental entender cuáles son nuestros mecanismos internos que nos hacen seguir posponiéndolas.
En otras palabras, tómese el tiempo para reflexionar sobre usted mismo, sus actitudes y lo que le dificulta tomar medidas. Con base en este conocimiento, será más fácil alinearte con las estrategias necesarias para guiar tus acciones y poder hacer las cosas de manera diferente.
Saber a dónde quieres ir es clave para enfocarte y, por lo tanto, evitar la procrastinación. De esta forma, con objetivos bien definidos, se facilita la toma de decisiones y la selección de lo que es prioritario. Con los planes desarrollados y el objetivo enfocado se evitan otros problemas como la angustia y el sentimiento de incapacidad y estancamiento.
Definir claramente las metas es clave, pero el secreto para alcanzarlas está en nuestro mundo interior y nuestras emociones, así que conecta la dinámica emocional a cada meta.
Visualízate logrando tu objetivo y nota las emociones que despierta en ti. Cuando lo hagas, permítete, en ese momento, quedar atrapado en esa emoción y lanzarte a la acción, ¡producir!
Incluso si estás muy alineado contigo mismo y con lo que quieres lograr, naturalmente fracasarás. Cuando esto sucede, es importante analizar qué podrías haber hecho diferente, así como los factores involucrados, tratando de no entrar en un ciclo de autocrítica que te frustre y te lleve a dilación.
Otro factor que contribuye a la procrastinación es la creación de objetivos lejanos o muy complejos. Esto se debe a que estas tareas se suelen poner para hacerlas más tarde, ya que son más difíciles, y por lo tanto, terminan por no hacerse y posponerse indefinidamente.
Para lograr estos objetivos "superiores", los expertos recomiendan dividirlos en pasos más pequeños con plazos más alcanzables. Como resultado, los pequeños pasos hacia el proyecto se convierten en victorias y elevan la autoestima.