El jueves (3), el Banco Itaú comenzó a tener problemas con los extractos y pagos. En este sentido, los usuarios del banco reportaron que había montos en sus cuentas que excedían lo normal y montos que estaban por debajo de lo que realmente debían ser.
La aplicación bancaria estuvo fuera de línea durante la tarde en un intento de reestructurar la base de datos para solucionar el problema en cuestión. El mayor problema es que las personas que tenían dinero extra en su cuenta lo gastaron creyendo que esa cantidad era suya, lo que en realidad podría causar algunos problemas a estos usuarios.
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Según el especialista en derecho digital de Assis e Mendes Advogados, Adriano Mendes, “la ley brasileña dice que no podemos usar lo que no es nuestro. Esto puede ser tanto un asunto penal como civil”. Para la abogada Carolina Carvalho de Oliveira, de Campos & Antonioli Advogados Associados, su punto de vista es el mismo que el de Mendes.
El abogado señala que “quien haya hecho mal uso del dinero que ingresó, por error, en la cuenta bancaria, puede ser responsable penalmente por el delito de apropiación de una cosa por error, caso fortuito o fuerza de la naturaleza, previsto en el art. 169”. El artículo al que se refiere el abogado dispone prisión de un mes a un año o multa.
Evidentemente, Itaú logró regularizar su base de datos. Tras la corrección, algunos clientes que habían gastado cantidades que no les correspondían tenían cuentas bancarias negativas. Según Mendes, Itaú puede cobrar esas deudas generadas por un crédito preaprobado, como con un sobregiro.
Sin embargo, las deudas que superen esta cantidad, la empresa tendrá que acudir a los tribunales para cobrarlas. El especialista en fintechs y medios de pago de Cescon Barrieu Advogados, Alexandre Vargas, explica que cuando el el crédito del cliente es contra el banco, el banco le debe al usuario, pero cuando el cliente es negativo, es él quien le debe el Banco. De esta forma, quien gastó el dinero que no era suyo tendrá que devolver esa cantidad a Itaú, que puede acudir a los tribunales para recuperar ese dinero.
Sin embargo, aunque este error no acabe en la cárcel, puede tener otras consecuencias. Mendes dice que solo el dinero no es tuyo, no lo uses. Espera uno o dos días para que se liquide el saldo. Si no, abre una reclamación para devolverlo, porque eso es correcto y ético”. Además, no podemos olvidarnos de las personas que amanecieron con sus saldos negativos por error bancario.
En este caso, Mendes dice que “el banco se encargará de reembolsar las cantidades e indemnizar por los perjuicios causados”, es decir, el abogado recomienda encarecidamente que los usuarios que hayan experimentado este problema se comuniquen con su banco y su administrador de cuenta por escrito. Este procedimiento asegura al cliente fundamentar su denuncia y si sufre otros perjuicios, se podría fundamentar una reclamación de indemnización por daño moral.
Geógrafo y pseudoescritor (o no), tengo 23 años, soy de Rio Grande do Sul, amante del séptimo arte y todo lo que implica comunicación.
