El costo de vida es cada día más caro, con demandas creadas en todo momento que antes no existían. Por eso, más de la mitad de todos los que están en la base de Serasa tienen 3 o más tarjetas de crédito. La razón principal de esto es sumar los límites para poder hacer compras más grandes. Así lo señala una encuesta publicada recientemente.
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De acuerdo con la información, la tarjeta de crédito se utiliza principalmente para compras a plazos, representando el 61% del negocio. Sin embargo, el 37% lo utiliza para las compras cotidianas, como el mercado y la farmacia; 37% para compras de emergencia y otro 31% lo usa exclusivamente para internet.
Todavía hay un 14% de personas que utilizan el crédito de forma muy peligrosa. Convierten el dispositivo en una extensión de los ingresos mensuales. Esto significa que todavía hay consumidores que utilizan dinero que “no tienen” para pagar sus gastos, lo que es un grave error en la opinión unánime de los especialistas.
La encuesta fue realizada con 3.097 clientes entre el 2 de abril y el 2 de mayo, revelando así las tarifas brasileñas vigentes. Más de la mitad de las personas entrevistadas tienen 3 o más tarjetas para sumar los límites y tener medios para gastar en compras más grandes.
Sin embargo, los analistas señalan que se trata de un hábito peligroso y que con el tiempo puede poner en serios problemas a los ciudadanos. La acumulación de deudas puede conducir a la pérdida de crédito y poder adquisitivo en la sociedad en general.
Las principales recomendaciones son pagar los servicios a plazos y utilizar el sistema de puntuación de la marca para obtener ventajas como cashback, millas, descuentos, etc. De esta forma, la tarjeta se convierte en un dispositivo que trabaja a favor del consumidor y no en su contra.
El interés del crédito sigue siendo alto y es fácil liquidar su vida financiera con un uso desenfrenado y sin un propósito benéfico.