El proceso de cicatrización de heridas puede no ser tan rápido, ya que variará de persona a persona. Estos no son simples cortes y moretones que sanarán en menos de una semana, aunque también requieren un cuidado suave. También están las conocidas heridas crónicas que tardan mucho tiempo en cicatrizar por completo.
Son las heridas las que requieren cirugía en la mayoría de los casos. Casos de úlceras que no cicatrizan o quemaduras graves, muchas veces causadas por el proceso de la diabetes. Se ha estimado, por ejemplo, que Brasil tiene cerca de 5 millones de personas con heridas similares a estas.
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Pensando en este tratamiento prolongado, el Instituto Tecnológico de California (Caltech), guiado por un grupo de científicos, ha desarrollado un método de tratamiento con el “vendaje inteligente” para garantizar una curación controlada y rápida.
El estudio fue publicado en
Los investigadores de Caltech alinearon las perspectivas de una condición que es difícil de curar con un sistema bioelectrónico capaz de monitorear la herida. La electrónica cumple la función de monitorizar la herida y aplicar pequeños estímulos para asegurar la cicatrización.
El mayor problema con las lesiones crónicas, como dijeron los investigadores, es la sumisión a procesos invasivos, como cirugía – y tratamientos paliativos con drogas extremadamente fuertes, induciendo al paciente a estar en una condición delicado. Para ellos, este es un problema al que se enfrentan las personas todos los días en todo el mundo.
El vendaje se verá como una placa o parche que se puede desechar. Compuesto por un hidrogel con la cantidad ideal para medicación, biosensores y electrodos. Además de estos pasos, los dispositivos permitirán la aplicación de pequeños estímulos eléctricos, lo que marca una diferencia total en este proceso.
Los biosensores podrán monitorear el pH de la herida, los niveles de glucosa del paciente, la temperatura del sitio y las cantidades de lactato y ácido úrico que hay en la herida. Esta evaluación junto con el estímulo eléctrico hará que la cicatrización sea más rápida, liberando también cantidades ideales de antibióticos y antiinflamatorios en la herida.
Por ahora, se están realizando pruebas en los laboratorios para probar heridas de ratas diabéticas y ratones lesionados. El experimento hasta el momento ha mostrado una intensa cicatrización de las heridas en las ratas que presentaban las condiciones de un diabético.
Los investigadores pasarán al trabajo y las pruebas en humanos después de que el laboratorio complete la investigación. La expectativa del producto es buena, pero es posible que recién se comercialice en los próximos 10 años.
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