Después de semanas de intensa especulación y esperanza, varios laboratorios lograron recrear la apatita de plomo modificada conocida como LK-99.
Este desarrollo, fruto del trabajo de investigadores coreanos del sur, llevaba consigo la promesa de ser un superconductor. Lamentablemente, sin embargo, esta expectativa no se materializó.
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A través de una publicación en Twitter del Centro de Teoría de la Materia Condensada de la Universidad de Maryland, en Estados Unidos, se comunicó:
“Con gran pesar hemos llegado a la conclusión de que el juego ha terminado. LK-99 no actúa como superconductor, ya sea a temperatura ambiente o a temperaturas extremadamente bajas”.
“Se configura como un material de alta resistencia, pero de baja calidad. No hay más argumentos. Los datos hablan por sí mismos”.
Consejo: para obtener más información sobre este material, consulte nuestro artículo sobre el LK-99, publicado cuando aún era una promesa muy prometedora.
Al recrear el material según el artículo original, los laboratorios no encontraron rastros de superconductividad, que era el propósito de esta invención.
De hecho, se identificó un aumento en la resistividad eléctrica del cristal LK-99 a medida que disminuía la temperatura, caracterizándolo casi como un "anti-superconductor".
“La profesora Susannah Speller del Centro de Superconductividad Aplicada de Oxford explicó:”
“Cuando tratamos con superconductores, la característica más notable es la resistencia cero. Al enfriarlo, debería perder instantáneamente esta resistencia, llegando a cero cuando se encuentra en un estado superconductor”.
A pesar de la frustración causada por estos desarrollos, la investigación en el campo de la superconductividad sigue progresando y la La esperanza es que, durante la próxima década, puedan aparecer en el mercado nuevos materiales con propiedades revolucionarias.
La búsqueda incesante de avances científicos continúa y, aunque el LK-99 no haya ganado el título de superconductor, las puertas siguen abiertas para nuevos descubrimientos e innovaciones.