Investigaciones del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística - IBGE, muestran que sólo el 54,6% de las mujeres son capaces de conciliar la maternidad y el mercado de trabajo en 2021. En el caso de los hombres, el porcentaje salta a aproximadamente el 90%. La encuesta también revela que las mujeres suelen optar por dejar de lado el desarrollo profesional para cuidar a sus hijos.
De esta forma, se evidencia que la responsabilidad por la crianza y desarrollo de los hijos sigue siendo una tarea muy femenina.
vea mas
La madre informa a la escuela que la hija de 4 años, que prepara su almuerzo, puede…
La princesa Charlotte 'sin querer' le causa problemas a...
Lea mas:Las reglas de trabajo se vuelven más flexibles para las personas con niños pequeños
La encuesta del IBGE también trae otros datos relevantes sobre el tema. De las mujeres que no tienen hijos, solo el 67,2% de ellas tiene trabajo, mientras que el porcentaje de hombres con contrato laboral y sin hijos es del 83,4%. Inclusive, el 35% de las mujeres prefieren no tener hijos o temen quedar embarazadas, por miedo a perder su propio trabajo, por la supuesta carga atribuida a la licencia por maternidad.
La práctica de despedir a una mujer embarazada por su condición es ilegal en Brasil, según lo determina la Consolidación de las Leyes del Trabajo. Así, no es raro ver que hombres sean contratados para un puesto en lugar de mujeres, por lo que el criterio de exclusión ocurre primero.
Sin embargo, debido al papel de proveedor asignado a los hombres en la sociedad, el número de hombres contratados con hijos es mayor que el de hombres sin hijos, solteros o no.
Sin embargo, las encuestas también indican que el 48% de los hogares brasileños están encabezados por mujeres. Así, esta situación demuestra cómo la carga del cuidado y manutención de los hijos sigue siendo femenina en Brasil.
Los niveles educativos también afectan a las mujeres de manera diferente
Cuando el análisis de la maternidad y el mercado laboral se restringe solo a las mujeres, se observa que el nivel de educación afecta a las madres de diferentes maneras.
Por ejemplo, entre las mujeres que son madres y tienen estudios superiores, la caída de la tasa de empleo se reduce al 35%, 12 meses después del inicio de la licencia por maternidad. Para las mujeres con menor nivel educativo, el porcentaje alcanza el 51%.
Sin embargo, después de 2 años del nacimiento de los hijos, el 50% de las mujeres en licencia de maternidad se fueron del trabajo o cambiado de puesto, situación que se mantiene hasta 4 años después del nacimiento del niño.