ChatGPT se ha convertido en una herramienta indispensable en oficinas, agencias e incluso hogares de todo el mundo. Quiero decir, casi todos.
En China, por ejemplo, el software sigue sin funcionar y, para que pueda ser utilizado por los residentes, el país pidió una serie de reglas a los desarrolladores delInteligencia Artificial (IA).
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Entre la serie de normas publicadas por el gobierno chino el 13 de julio, se encuentra que las aplicaciones de IA generativa adoptan "valores socialistas fundamentales". Estas normas entrarían en vigor a partir del 15 de agosto.
Según el sitio web Diário Online, la regulación detallada del gobierno chino establece que los servicios de Inteligencia Artificial generativa no pueden generar contenido que:
“[…] incite a la subversión del poder estatal y al derrocamiento del sistema socialista, que ponga en peligro los intereses y la seguridad nacional, que afecte la imagen del país, incitar a la secesión, socavar la unidad nacional y la estabilidad social, promover el terrorismo, el extremismo, el odio nacional y la discriminación ética, la violencia, la obscenidad y pornografía."
No sorprende que China haya pedido la regulación del software, dada la espinosa historia del país con muchos servicios de telecomunicaciones.
En este caso, el propio Estado chino afirma que es una tarea difícil. La idea es hacer una implementación “gradual”. De esta forma, evitan frenar la plataforma.
No es solo China la que tiene problemas con el contenido generado por IA. En Estados Unidos, por ejemplo, algunos grupos conservadores cuestionan los algoritmos de software como ChatGPT y bardo, De Google.
Esta ala de la sociedad cree que los "valores" asociados con el "progreso personal" de las empresas de Silicon Valley están ocultos en el contenido.
Además, el grupo de países de la G7 (compuesto por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) se reunió para tratar de sugerir su propia regulación para el software de IA.
Italia, por ejemplo, lideró un movimiento para regular ChatGPT que, según el sitio web Diário Online, se confundió con una suspensión.
Graduada en Comunicación Social en la Universidad Federal de Goiás. Apasionado por los medios digitales, la cultura pop, la tecnología, la política y el psicoanálisis.