Stacy Medina, una mujer de 59 años del estado de Nevada, en Estados Unidos, siempre ha llevado consigo el deseo de conocer a su madre biológica, ya que fue adoptada cuando aún era una niña.
En marzo de 2021 tomó la decisión de emprender un prueba de ADN con la esperanza de encontrar pistas que la lleven hasta su madre. Sin embargo, lo que sucedió fue algo que ella nunca podría haber predicho: en lugar de su madre, encontró a su hijo perdido.
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Stacy Medina creció sabiendo que había sido adoptada por sus padres, Rochelle, quien falleció en 2003, y David, quien nos dejó en 2021. Tuvo una infancia feliz junto a sus hermanos mayores, Jeff y Craig.
Sin embargo, cuando sólo tenía 16 años, la vida de Stacy dio un giro inesperado cuando quedó embarazada. A pesar del shock que sufrió su familia con la noticia, la apoyaron plenamente y Stacy dio a luz a su hija en enero de 1981, apenas dos días antes de cumplir 17 años.
“Ser madre a una edad tan temprana, el viaje ha sido increíblemente desafiante. Cuando volví a quedar embarazada a los 21 años después de una relación, supe que no podría criar a otro hijo”, explicó Stacy.
Nunca le reveló al padre de su bebé que estaba embarazada otra vez y, desconsolada, buscó ayuda de una agencia de adopción para asegurarse de que su segundo hijo tuviera una vida estable y amorosa.
El bebé nació el 9 de noviembre de 1985 y Stacy dejó una carta a la agencia, incluyendo su información de contacto en caso de que su hijo quisiera conocerla en el futuro.
A lo largo de los años, Stacy nunca ha dejado de pensar en su hijo perdido y ha compartido abiertamente su historia con su pareja, Mark, desde que se conocieron en 1997.
En 2019, Stacy se enteró de las pruebas de ADN caseras y decidió intentarlo de nuevo. Los resultados la conectaron con dos medias hermanas, pero también trajeron la noticia de que su padre biológico había fallecido, lo que supuso un duro golpe para ella.
Decidido a encontrar a su madre biológica, Mark compró una prueba de ADN para Stacy como regalo de cumpleaños en enero de 2021. Los resultados, sin embargo, fueron sorprendentes.
Si bien no encontró a su madre, Stacy descubrió una coincidencia sorprendente: su hijo, que se había hecho la misma prueba de ADN.
“Con manos temblorosas, le envié un correo electrónico, incluyendo mi número en caso de que quisiera hablar conmigo. Dos horas después, respondió diciendo que quería hablar”, recordó Stacy.
Su hijo es Ben, vive a nueve horas de distancia en California, sirvió en el ejército y tuvo cinco hijos.
Stacy se sintió aliviada al saber que Ben había tenido una vida feliz con Padres adoptivos cariñoso, pero también le rompió el corazón saber que él la había estado buscando durante años, incluso contratando a un detective privado.
Luego de una emotiva videollamada, madre e hijo se reconectaron y comenzaron a hablar a diario. Debido a la pandemia de Covid-19, tuvieron que esperar un año para reunirse presencialmente. En marzo de 2022, Stacy y Mark condujeron casi mil millas hasta la casa de Ben.
“Estaba nervioso, pero tan pronto como salió por la puerta con su hijo menor en brazos, nos abrazamos y de repente todo encajó. Todo se sintió tan natural”, dijo.
Ben y su familia le dieron una cálida bienvenida y ahora comparten un fuerte vínculo como familia reunida. Ahora, Stacy promete estar eternamente agradecida a Mark por el mejor regalo de cumpleaños que jamás haya recibido.
