O DÍA DE LOS NIÑOS se celebra anualmente el día 12 de octubre, en este día es común obsequiar y honrar a los niños con obsequios y tarjetas con Mensaje del día del niño.
Para ayudarte a realizar tu tarjeta o homenaje en las redes sociales, hemos seleccionado varios mensajes para el dia del niño, verificar:
Regalo de por vida,
nunca mas soledad!
bendito angelito,
pureza de corazón.
Hermosa joya rara
Razón de mi vida.
Quiero vivir repitiendo:
¡Yo amo amarte!
Dios te puso en mi vida
para traer felicidad.
Siempre viviremos juntos
con mucha complicidad.
¡Luz y esperanza!
¡Corazón lleno de amor!
¡Riqueza que vino del cielo!
¡Regalo de Nuestro Señor!
¡Feliz Día del Niño!
Una madre vio una vez a su hijo pequeño sentado en un rincón de la habitación, recitando en voz alta las letras del alfabeto: a, b, c, d, e, f, g ...
Intrigada, ella se acercó y le preguntó: hijo, ¿qué estás haciendo?
Mamá, me dijiste que siempre orara a Dios. Resulta que no sé cómo hacerlo. Entonces decidí seguir diciéndole todo el alfabeto a Dios, pidiéndole que dijera una buena oración con estas letras.
Cuántas veces decimos que no sabemos cómo orar ni cómo dirigirnos al Creador. Incluso les pedimos a los demás que oren por nosotros, por nuestras necesidades, por nuestros afectos, porque no sabemos orar.
Y es tan simple. Orar es dialogar con quien es el máximo responsable de nuestra vida, de todo lo que somos, siempre que partamos de su voluntad: Dios.
No hay necesidad de palabras difíciles, elaboradas o memorizadas. La oración debe ser espontánea, generada por la necesidad del momento. O por un momento de intensa alegría, un logro logrado, un objetivo logrado.
El Maestro Galileo ya nos lo ha enseñado en su tiempo: no creáis que por mucho que habléis, seréis escuchados. No es por la multiplicidad de palabras que te responderán.
Y sabiamente le enseñó a Jesús que uno debe orar al Padre en secreto. Por eso, hay muchas oraciones que ni siquiera se dicen.
Estallan del alma al cielo sin que intervengan los labios, sin que se disparen las cuerdas vocales.
Dios ve lo que sucede en el fondo de los corazones. Lea la mente de sus hijos.
La oración puede volverse incesante en nuestras vidas sin tener que tomar una posición especial. La oración puede ser en cualquier momento, sin ninguna interrupción en nuestro trabajo.
Puede ser el acto de reconocer a Dios cuando escapamos de un accidente que podría ser fatal. Puede ser un momento de éxtasis por la belleza del océano que lanza sus olas contra las rocas, queriendo arrebatarlas contra tu pecho.
O, aún, antes del espectáculo de los colores del arco iris después de la tormenta que destrozó las rosas.
Sin fórmulas prefabricadas, sin palabras ordenadas o difíciles de pronunciar.
Ora, gracias. Al igual que un niño que recibe un juguete, salta al regazo de su padre y dice sonriendo: Gracias, papá. Me encantó.
O cuando, suplicante, pregunta: ¿Papá compra un helado? Oh por favor. Cómpralo, papi.
Sencillez, sencillez. Así es como debemos dialogar con Dios nuestro Padre.
Dios, en su infinita misericordia, creó un canal especial de comunicación para que en cualquier momento, en cualquier lugar, todo ser pensante pudiera hablarle.
Este canal se llama oración. Accesible para los pobres, los ricos, los alfabetizados y la falta de recursos intelectuales. Al niño y al adulto; para los que creen e incluso para los que no creen pero que un día se dan cuenta de que es muy reconfortante tener un Padre que siempre escucha, asiste y ayuda.
No olvide utilizar su canal de comunicación especial.
Corre hasta quedarte sin aliento, rueda por el suelo sin miedo a ensuciarte, di lo que te venga a la cabeza y haz una broma de cualquier cosa. Época de la vida que extrañamos cuando envejecemos. Y es exactamente en esta fecha dedicada a todos estos pequeños seres, que tienen la inocencia como principal característica, que no solo debemos valorar la vitalidad infantil, sino también buscar rescatar la esencia de niño.
Para aquellos de ustedes que hoy juegan con una sonrisa inocente, sin malicia en su mente, y que incluso en el mal ve el bien.
Eres el futuro, niña.
Un día el mundo será tuyo, pero por ahora lo único que importa son los juegos, el sueño tranquilo y los dulces irresistibles.
¡Ahora solo importa que seas feliz y que tus sueños sigan siendo coloridos e inocentes durante mucho tiempo!
Deseo a todos los niños que nunca tengan prisa por crecer.
Disfruta cada día, cada hora, cada minuto de felicidad si eres un niño.
Son tarjetas listas para imprimir o compartir en redes sociales. Varios mensajes y frases: